Ya más tranquilos, frente al Mar que baña las costas gaditanas, decidieron inmortalizar esas miradas, esos gestos y ese “vamos a dedicar unos minutos”. Y es que las sesiones de postboda tiene una doble función. Son además esos momentos que nos alejan por unos instantes de la velocidad vertiginosa que la vida nos obliga a llevar a veces… y, aunque con algún que otro testigo que sostiene una cámara en la mano, nos frena y caemos en la cuenta de mirarnos de cerca, sin ninguna otra cosa mejor que hacer…
“Amo como ama el amor, no conozco otra razón para amar que amarte” Fernando Pessoa
LOVE forever!